La web 3.0 empezó bajo el concepto básico de que el futuro de la web era volver a una web más técnica, más semántica, pero en realidad acabó siendo una web basada en un concepto totalmente descentralizado.
Las principales aplicaciones y usos hasta ahora tienen que ver con la descentralización criptográfica, los contratos inteligentes, los NTF y el cambio en la forma en que funciona el contenido centralizado en la actualidad.
Pero lo más importante no son solo las aplicaciones que se utilizan hoy en día, sino también el potencial que tiene la tecnología para crear el futuro. Al día de hoy ya contamos con las primeras empresas que, como Zenki, comienzan a preparar y presentar ecosistemas para operar negocios de manera descentralizada.
En este momento, la Web 3.0 se está definiendo y está declarando cuál será el futuro de la tecnología, los negocios y la interacción de las sociedades. Es una forma más abierta en la que vamos a trabajar, se democratiza la confianza y se eliminan las instituciones que hoy lo controlan todo.
